"A Dios rogando...
y con el Mazo dando"
Por Carlos Liranzo
Esta expresión usada frecuentemente por uno de mis profesores de primaria, es un dicho muy conocido, por tal razón vamos a ver qué quiere decir 'la gente’, con este famoso dicho.
Esta expresión usada frecuentemente por uno de mis profesores de primaria, es un dicho muy conocido, por tal razón vamos a ver qué quiere decir 'la gente’, con este famoso dicho.
El uso de estas sabias palabras, tiene su origen bíblico aunque no de una manera directa. La connotación que se le da, es que, “Usted puede hacer el uso de la fuerza, si el objetivo primordial que usted tiene, va a beneficiar a algo, a alguien o va a tener una diferencia positiva en cualquier ámbito que usted se desarrolle".
En el caso de mi profesor de primaria, alegaba que mediante el uso 'del Chucho' (Mazo, látigo o cuerda), podía hacer que sus alumnos aprendieran mucho mejor, es por ende que el Mazo estaba justificado, cumplía su fin y según Él, era un método eficaz de enseñanza.
Era algo diferente en el relato de Jesús, estaba envuelta la adoración a la más alta autoridad del universo, su padre celestial Jehová. En la ley que Dios le dio a Moisés habían leyes específicas de cómo tratar al 'Templo de Dios’, y era conocido de todos los adoradores fieles... pero lea el relato bíblico tomado directamente de La Traducción del Nuevo Mundo de las Santas Escrituras, capítulo 2 del libro de Juan, versículos 14 al 17:
Y halló en el templo a los que vendían ganado vacuno y ovejas y palomas, y a los corredores de cambios en sus asientos. Por consiguiente, después de hacer un látigo de cuerdas, expulsó del templo a todos aquellos junto con las ovejas y el ganado vacuno, y desparramó las monedas de los cambistas y volcó sus mesas. Y dijo a los que vendían las palomas: "¡Quiten estas cosas de aquí! ¡Dejen de hacer de la casa de mi Padre una casa de mercancías!". Sus discípulos recordaron que está escrito: "El celo por tu casa me consumirá".
El Templo tenía que ser tratado como lo que era, Santo a los ojos de Dios. Otro detalle que debemos tomar en cuenta es que estas no eran personas ignorantes a las leyes de Dios, eran comerciantes y cambistas que estaban bien asociados con todas las costumbres del pueblo judío. Según algunos biblistas pueden incluso, que aquel negocio perteneciera al Sumo Sacerdote Anás, quien sabía que en el templo se estipulaban cierto tipo de monedas, y por ello necesitarían cambistas, y ciertos tipos de animales, por el cual también se necesitaría a alguien que supliera dichos animales. Al parecer era una acción humanitaria la que llevaban a cabo. Entonces, ¿Por qué la vio Jesús diferente y también diferente a como la veía mi profesor de escuela primaría?...Porque los medios que se estaban usando no eran los apropiados. Estos cambistas estaban cobrando una exorbitante cantidad de dinero por 'un simple cambio’, y los comerciantes estaban aumentando los precios de los animales en más de un 100% de su precio habitual.
Como en el caso de mi maestro de primaria, este no era una acción para alcanzar un fin, era "el celo de Jesús consumiéndolo" en defensa de la adoración límpia y sin contaminación en la casa de nuestro padre celestial Jehová Dios.
En el caso de mi profesor de primaria, alegaba que mediante el uso 'del Chucho' (Mazo, látigo o cuerda), podía hacer que sus alumnos aprendieran mucho mejor, es por ende que el Mazo estaba justificado, cumplía su fin y según Él, era un método eficaz de enseñanza.
Era algo diferente en el relato de Jesús, estaba envuelta la adoración a la más alta autoridad del universo, su padre celestial Jehová. En la ley que Dios le dio a Moisés habían leyes específicas de cómo tratar al 'Templo de Dios’, y era conocido de todos los adoradores fieles... pero lea el relato bíblico tomado directamente de La Traducción del Nuevo Mundo de las Santas Escrituras, capítulo 2 del libro de Juan, versículos 14 al 17:
Y halló en el templo a los que vendían ganado vacuno y ovejas y palomas, y a los corredores de cambios en sus asientos. Por consiguiente, después de hacer un látigo de cuerdas, expulsó del templo a todos aquellos junto con las ovejas y el ganado vacuno, y desparramó las monedas de los cambistas y volcó sus mesas. Y dijo a los que vendían las palomas: "¡Quiten estas cosas de aquí! ¡Dejen de hacer de la casa de mi Padre una casa de mercancías!". Sus discípulos recordaron que está escrito: "El celo por tu casa me consumirá".
El Templo tenía que ser tratado como lo que era, Santo a los ojos de Dios. Otro detalle que debemos tomar en cuenta es que estas no eran personas ignorantes a las leyes de Dios, eran comerciantes y cambistas que estaban bien asociados con todas las costumbres del pueblo judío. Según algunos biblistas pueden incluso, que aquel negocio perteneciera al Sumo Sacerdote Anás, quien sabía que en el templo se estipulaban cierto tipo de monedas, y por ello necesitarían cambistas, y ciertos tipos de animales, por el cual también se necesitaría a alguien que supliera dichos animales. Al parecer era una acción humanitaria la que llevaban a cabo. Entonces, ¿Por qué la vio Jesús diferente y también diferente a como la veía mi profesor de escuela primaría?...Porque los medios que se estaban usando no eran los apropiados. Estos cambistas estaban cobrando una exorbitante cantidad de dinero por 'un simple cambio’, y los comerciantes estaban aumentando los precios de los animales en más de un 100% de su precio habitual.
Como en el caso de mi maestro de primaria, este no era una acción para alcanzar un fin, era "el celo de Jesús consumiéndolo" en defensa de la adoración límpia y sin contaminación en la casa de nuestro padre celestial Jehová Dios.
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