La costumbre de jugar un 'numerito' en la caraquita era común entre los viejos nuestros. La Caraquita era una lotería que se producía en Caracas, capital de Venezuela, se escuchaba en Haina con muchas dificultades, en algunas emisoras de radio, específicamente en Amplitud Modulada.
A finales de los setentas, sólo algunos sitios vendían "números de La Caraquita". Por ejemplo, yo tenía que subir del 17 a la Avenida Duarte, al Colmado Raymond, para apuntar los números que mi papá mandaba a jugar, con la agravante de que el viejo esperaba casi a las nueve para mandar a jugar sus números.
Casi todo el largo trayecto era muy oscuro, pero lo más fuerte era pasar por el pequeño potrero de Don Manolo De la Cruz, casi frente a la casa de Darío (Otrora Ramón Linó). Se decía que ahí salía un 'Bacá' todas las noches.
En esos días, había ocurrido un accidente en el Ingenio Rio Haina, en el que murió un primo de Bolívar Mazara (Bolivita). Cuando Gersin me dio esa noticia me dijo: - “Se mató en el Ingenio el Primo de Bolivita, el que jugaba pelota con nosotros.” El muchacho que murió se llamaba Benito; pero el que jugaba pelota con nosotros era Arturo, su hermano menor.
Para mí, el que había muerto era Arturo. Pues resulta que cuando yo venía de jugar los números de la Caraquita, Justamente, me alcanza Arturo en el pedacito oscuro, diciéndome: -“¡Dionic, espérame!, ¡Moreno, Moreno, Hey soy yo, Arturo! Y mientras más yo corría, más corría él detrás de mí.
Me metí a toda velocidad en el Colmado de Mago (hoy La Tatagua). Arturo también se metió en el Colmado, e inmediatamente yo salí por la otra puerta a ciento y pico.
En el camino me encontré a Salvador Vargas, le conté lo que me había pasado; y éste me respondió: -Es que no fue Arturo el que se mató, fue Benito, el más grande.
Yo solo pude decir: -"¡Co_ _, no relaje!"
Dionicio Liranzo. hondovallesur@hotmail.com
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