Por Kayla Liranzo
He oído tantas cosas bonitas de Doña Carmita que mi Papi Carlos me ha dicho. Pensando en ella, en su amor por la gente, decidí compartir con ustedes algunos textos bíblicos animadores.
¿A dónde está Doña Carmita? Preguntas como ésta se hacen todas las personas sin importar quienes son ni de dónde vienen. De nuestros seres queridos que se han dormido en la muerte, muchos se preguntan: ¿Qué ha pasado con ellos? ¿Están sufriendo? ¿Nos cuidan de algún modo? ¿Podemos ayudarlos? ¿Los volveremos a ver?...
Lo que sucede cuando fallecemos no es ningún misterio para Jehová Dios. Cuando una persona muere, deja de existir. La muerte es lo contrario de la vida, de esa manera los muertos no ven ni oyen ni piensan.
Eclesiastés Capítulo 9, versículos 5 y 6 nos dice: “Los vivos tienen consciencia de que morirán, pero en cuanto a los muertos ellos no tienen consciencia de nada en absoluto… porque el recuerdo de ellos se ha olvidado. Y también su amor y odio y celos ya han perecido…”
La vida de nosotros es como una vela que cuando se apaga no va a ningún sitio sino que deja de existir. En conclusión los muertos están dormidos esperando por la llamada de resurrección de Jesús.
Pueden leer en su Biblia algunos de las resurrecciones que se llevaron a cabo.. ( Juan 11:38-44;1 Reyes 17:17-24; 2 Reyes 4:32-37, 13:30 y 31; Mateo 28:5-7; Lucas 7:11-17, 8:40-56; Hechos 9:36-42 y 20: 7-12)
¿Tienen los muertos una esperanza? ¡Claro que sí! Ellos tienen la esperanza de la resurrección. Jehová anhela el día en que todos los muertos, se van a poder reunir con sus seres queridos otra vez. Juan 5:28 nos dice que “Todos los que están en las tumbas commemorativas oirán su voz y saldrán”.
Tenemos que tener Fé y hacer lo mejor que nosotros podamos. La Biblia está llena de promesas que Jehová nos va a cumplir, pero una en especial es lo que nos dice en Revelación 21:4 .....“ y limpiará toda lágrimas de sus ojos y la muerte no será más ni existirá ya más lamento ni clamor ni dolor porque las cosas anteriores han pasado".
En el Paraíso Jehová nos hace la promesa en Isaías 11: 6-9 de un mundo en que no habrá odio, a donde vamos estar libres de preocupaciones y no vamos a temer que nuestros seres queridos en algún momento nos vayan a dejar.Espero que esta reflexión haya sido de motivación y refrigerio. Esperando conocerlos pronto: Kayla Liranzo.
Reporte cortesía de http://www.haina17.blogspot.com/
