La vida va a escalas y así la percibimos en las diferentes etapas que esta nos presenta. De niños, nuestros padres son enormes montañas humanas. Cuando tu creces por encima de ellos te parecen de muy corta estatura.
La casa Curial de Hondo Valle era percibida por mí como una gran edificación; era enorme e imponente. Paradigma de grandeza de infraestructura.
Una vez, estuvimos jugando con una pelotita de media construida por Milton Encarnación; él se cuidaba de que sus pelotas de media tuvieran un buen bote y por eso se empeñaba en hacerlas bien apretaditas, lo cual ayudaba, además, a que fueran mas duraderas.
El juego se celebraba al lado de la Iglesia, en dirección hacia La Casa Curial.
Era un Mes de Mayo y Hondo Valle estaba celebrando Fiestas Patronales. Dichas fiestas estaban siendo patrocinadas por el Club Juventud de Hondo Valle (JUHOVA), que había motivado nuestro juego y cuyo presidente era Julio Alcides Segura.
El juego estaba bien animado. Nos enfrentábamos los muchachos de la Duarte: Johnny y Milton Encarnación, Moreno, Carlos y Julio Liranzo, Neno, Mario (Hermano de Bangé) y Fernelys Montero, (Fernelys y Julio jugaban con Ponche por ser los mas pequeños del grupo).
Nos enfrentábamos a un grupo encabezado por Rubencito, Wascar, Gustavito, Bocute, Johnny Yencis, Floirán y Tony (El hijo de Lívida, que también jugaba con ponche), entre otros.
En un momento de expectación, yo conecté un buen batazo, que pasó por encima de La Casa Curial. ¡Wao!, aquello fue grandioso. Cuando me mudé para Haina, esa era mi anécdota favorita. Relataba con orgullo que fui capaz de colocar la bola por encima de La Casa Curial y me jactaba de que ese era el edificio más grande de mi pueblo.
Años después, ya algo olvidada mi hazaña, llevé a dos amigos a conocer a Hondo Valle. Uno de ellos insistía en ver La Casa Curial; yo no entendía el por que de ese afán, solo se que cuando vio la edificación me dijo:
- Dionic, usted si es charlatán, esa es una casita de dos plantas y usted se vanagloriaba de que logró volar un gran edificio con un batazo.
A esto yo solo pude responder:
- Si, pero yo solo tenia Ocho o Nueve años. La vida va por escalas.
Su anécdota aquí: hondovallesur@hotmail.com