En otras ocasiones hemos tratado algunos valores, tales como la honradez, a honestidad y la integridad. Hoy les presentamos el valor del Respeto.
Recordemos que los valores son los cimientos de la sociedad. Tenerlos garantizan una sociedad más equilibrada, con menos fricciones y más ordenada. Sin embargo, el valor del Respeto nos va a permitir una interacción más adecuada.
Este valor implica la aceptación y comprensión de los demás. Nos hace ser considerados y observar una conducta basada en los demás.
Este valor implica la aceptación y comprensión de los demás. Nos hace ser considerados y observar una conducta basada en los demás.
Una buena parte de nuestras quejas con nuestro entorno, tienen una relación directa o indirecta con la falta al valor del respeto. Enumeraremos varios aspectos en los cuales debemos hacer conciencia del valor del respeto:
Respeto a la vida. Es lo más preciado del ser humano y no tenemos derecho a atentar contra ella. Ni a la nuestra, ni poner en riesgo la de los demás. Es un mandato divino.
Respeto a las plantas y los animales. Somos parte del mismo entorno y miembros importantes del Ecosistema. Exterminando una especie o un animal pudiéramos estar desencadenando un desastre.
Respeto al orden establecido. Las leyes reglamentan la convivencia armónica. Si todos las cumplimos nos acerca a la igualdad y la justicia.
Respeto a la propiedad ajena. Benito Juárez expresaba: "el respeto al derecho ajeno es la paz". Si no respetas esta máxima, no debes esperar que alguien lo haga contigo.
Respeto a las leyes de tránsito. No cumplirlas convierte nuestras calles en un caos que nos hace sentir amenazados sin necesidad.
Las personas que exhiben este valor como individuos inician desde temprano y lo transmiten a sus descendientes.
En las calles veremos que un individuo con este valor, respeta: los semáforos, las vías contrarias, no usa el celular mientras conduce pues respeta la vida, respeta a los mayores, a los niños, a la autoridad competente, a sus empleados, al pensamiento ajeno, la limpieza del entorno, cuida la forma de hablar, con su forma dá y exige, no participa en actos ilícitos, procura no ingerir sustancias que alteren su comportamiento; en fin, sigue una vida apegado a preceptos morales y patrones de conducta adecuados.
Luego de seguir estas notas, ¿por qué no hacer un compromiso de mejorar nuestra actuación e incorporar a nuestro comportamiento el valor del Respeto? Los resultados que obtendremos nos agradarán y tendremos todo nuestro entorno agradecido.
AUTOR: DARÍO RODRÍGUEZ.
(Cortesía del laborioso periódico barahonero "El Azucarero del Sur". Edición número 52.
*El autor es Psicólogo y Escritor.